Audi RS6 avant

El nuevo RS6 abandona el 5.2 v10 atmosférico de 580 CV por un nuevo 4.0 v8 de 560 CV, siguiendo la estrategia downsizing de nuestros días que entre otros empezó a poner el BMW M5.

Lo de que sea menos potente se queda en anécdota ya que ofrece 5 mkg más de par y se asocia a un cambio de 8 velocidades que permite un generosísimo desarrollo en 8ª, y un escalonamiento muy bien ajustado. Todo ello unido a 100 kg menos de peso debido a la tara del v8 y el aluminio que llega al 20% en la carrocería. Homológa mejores prestaciones y consumos. Esto se debe en parte a que el v8 desactiva cuatro cilindros en función de la demanda y dispone de Stop&Start. Es una auténtica obra de ingeniería. Empujando te sientes inmensamente lleno porque a 1000 rpm funciona de manera soberbia, así que solo hay que imaginarse como lo hace a 7000 rpm...
Sin las limitaciones que puedes anular al comprar el coche, puede alcanzar los 300 km/h. Pero lo más sorprendente es su chasis y transmisión que permiten aprovechar toda la potencia y no solo en las rectas.
Es el primero de la saga RS que incorpora suspensión neumática. Dispone de diferentes niveles: confort, auto, dynamic, individual y lift. El diferencial central de la transmisión plantea de partida desviar un 60% al eje trasero que puede llegar a recibir hasta un 85%. Entre un 40% y 70% recibirá el tren delantero. La capacidad de tracción parece irrompible y la precisión y solidez con la que pisa el asfalto harán que te confies en el volante.
 Además para el día a día resulta fácil y cómodo de usar. Un coche civilizado por el día y rabioso de noche.