Ford Focus del 2000

Todavía están presentes en la memoria las expectativas que causó la presentación del Ford Focus en Europa un año atrás, por lo que significaba en la estrategia del Ford 2000 que intenta poner a la casa del óvalo al frente entre todas las terminales del mundo. Una especie de "world car" de revolucionario diseño con soluciones radicales que hacían olvidar aquellos inconvenientes que arrastraba su antecesor, el Escort.
Lo cierto es que el Ford Focus ya estaba entre nosotros, con todos sus títulos a cuestas entre los que se destaca netamente el de " Car of the Year"

El primer punto en el que, sin duda, el Focus levantará opiniones encontradas. Fiel representante del estilo "new edge" de Ford (que comenzó con el Ka y siguió con el Cougar) se destaca por sus líneas en cuña, por las marcadas molduras del capot que le dan una imagen más musculosa y los pasarruedas que realzan ese aspecto
Todas las regulaciones conocidas hasta hoy, y esto incluye altura del asiento(eléctrica) y columna de dirección y profundidad del volante. Si hay algún pero, hay que buscarlo por el lado de los asientos, un poco duras y con cojín demasiado corto y plano que penaliza la sujeción lateral. Los comandos quedan a mano y no hay nada de qué quejarse en este aspecto. El espacio disponible es más que suficiente aun para los ocupantes de las plazas traseras.
Tablero de líneas modernas con innegable similitud con las del Ka, aunque un poco más sobrias. Abundante información por medio de testigos que se complementan con los datos que llegan del ordenador de a bordo. Carece de luz de reserva de combustible. Sistema clásico y de correcto funcionamiento, tanto para calentar como para enfriar el habitáculo.
No se trata de una novedad en el mercado nacional ya que se trata del mismo impulsor que equipa al Mondeo Guia. Un motor de última generación que tiene la potencia arriba (131 CV a 5.800 rpm) y cuya principal falencia radica en un bache en la curva de par en torno a las 3.000 rpm, por lo que la respuesta a ese régimen no es demasiado contundente. Rumoroso a altas velocidades. Por debajo de los 10 segundos en la prueba de 0 a 100 km/h. En cuanto al consumo resulta un poco austero si se maltrata el acelerador con el pie derecho, pero más que contenido si se conduce de manera razonable.
Nunca me ha gustado especialmente este Ford, ya que la mecánica suele fallar especialmente cuando llegamos a los 80000 km, lo digo por experiencia, por eso recomiendo buscar homólogos ya que esta generación de segundamano causa bastantes problemas. No obstante es un buen coche si se encuentra cuidado, y que llevaría a Ford a la creación de la siguiente generación del Focus que sería sobresaliente en la conducción.