Sin duda, un coche del que te gustaría que el viaje fuese lo más largo posible. En solo 4.5 segundos alcanza los 100 km/h. Tu cuello se hundirá en el reposacabezas. El Mitshubisi Evo, el Porsche asusta al verlo, pero ninguno asombra más que el CLK 63 AMG. Un lobo con piel de cordero, bajo un traje muy educado. Fuera de los normal posee tomas de aire para refrigerar los frenos, un pequeño alerón trasero y cuatro salidas de escape. Un volante grueso con levas del cambio semiautomático. Levas al fín grandes, fáciles de manejar, no como los antiguos y minusculos pulsadores.
Sin embargo no es nada fácil transmitir 481 CV de potencia al tren trasero por eso puede que a veces tengamos problemas con la transmisión. La zaga tiende a salirse y pelea duramente con el control de estabilidad. Sin el ESP, tu habilidad se pondrá a prueba con el volante. Sentirás el trabajo que hace AMG qie modifica suspensión, frenos y dirección.
Tiene algunas pequeñas lagunas como un obsoleto freno de mano, pedales demasiado grandes, y un volante algo grande. Uno de los principales problemas es su consumo que se encuentra en torno a los 22l/100km, algo bastante elevado pero para sus compradores eso no será un problema ya que supongo que no se comprarán este coche por su consumo, sino por supuesto tienen opciones más rentables.
En cuanto al precio hablariamos de unos 98000 euros, que teniendo en cuenta lo que puede desplegar está vestia no será tan desmesurado como podamos pensar. El seguro a todo riesgo para un conductor de entorno a los 30 años con 10 años de experiencia sí puede resultarnos elevado, ya que nos costaría unos 4900 euros, pero claro, ya sabemos que mantener estas máquinas no nos saldría nada barato.
En relación con sus rivales, en potencia les arrolla, y en cuanto a autonomía y precio dependería del modelo a elegir.
Lo que me está transmitiendo este coche es que ha nacido para sentir el verdadero poder de AMG.
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